Llega el decreto 490, reglamentario del Decreto Ley 1278.
- Luis Miguel Cárdenas
- 19 abr 2016
- 2 Min. de lectura
A finales del mes pasado el Ministerio de Educación Nacional (MEN) dio a conocer el decreto 490 de 2016, el cual reglamenta y hace unas precisiones sobre el decreto Ley 1290 de 2002 o también conocido como nuevo estatuto docente, y como complemento del decreto 1075 de 2015. Esta situación generó polémica entre la comunidad de docentes del país expresada en las diferentes redes sociales.
El decreto inicia mencionando los tipos de cargos docentes en donde surge una nueva categoría, los denominados docentes líderes de apoyo. Cuentan con los mismo derechos y deberes de los docentes, sin embargo, las funciones y dedicación a las actividades pedagógicas siguen siendo muy generales.
Pareciera ser que esta nueva categoría responde a las pretensiones del Programa para la Excelencia Docente y Académica: Todos a Aprender 2.0, de convertirse en política estado y lleva a concluir que los docentes tutores, que actualmente están vinculados con el programa, pasarían a ser los primeros docentes líderes de apoyo. Sin embargo, deben estructurarse detalladamente las funciones de estos docentes, ya que, en el afán de generar una mayor estabilidad del programa, se puede llegar a perder la esencia del mismo.
Por otro lado, se menciona la manera en que se puede aspirar a un cargo de docente o directivo docente, el cual no sufre mayores cambios, pero el procedimiento para nombrar los docentes provisionales intenta responder a una mayor transparencia en el proceso, sin embargo aún no es especifico en la manera en que un ciudadano puede aspirar a este tipo de cargo.
Finaliza refiriéndose a la cantidad de estudiantes por docente, la cual corresponde “…como mínimo 32 en la zona urbana y 22 en la zona rural”, situación que no cambió respecto a la anterior normatividad, pero establece una relación entre número de docentes y número de grupos, quedando un vacío en el máximo de estudiantes. A su vez esta reglamentación permite justificar los grupos numerosos de 50 o 60 estudiantes por salón.
Se invita a la comunidad docente a realizar una lectura detallada de este decreto y hacer una imagen critica del mismo, no solamente en la manera en que impacta al docente en su labor sino como se ve afectada la educación.
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